La crianza con apego es una filosofía basada en un continuo vínculo emocional de los padres donde el bebé es el protagonista durante los primeros años, ya que le proporciona la seguridad emocional indispensable para el correcto desarrollo de su personalidad e inteligencia, con efectos positivos en su niñez, adolescencia y adultez.

Bases de la Crianza con Apego:

1. Mantener los lazos afectivos desde el nacimiento
2. Lactancia materna
3. Dormir cerca del bebé
4. Mantener el contacto corporal
5. Confianza en el valor de su llanto como lenguaje
6. Ser flexible a la hora de inculcar hábitos en el niño
7. Mantener un equilibrio.

Durante los tres primeros años de vida, el cerebro del niño alcanza el 90% del tamaño adulto y coloca en su lugar la mayor parte de las estructuras que son responsables del funcionamiento emocional, conductual, social y fisiológico del resto de su vida. Por lo tanto, especialmente en estos años, el niño necesita sentirse seguro y equilibrado emocionalmente para tener un adecuado desarrollo.

En este contexto, la crianza con apego por parte de los padres resulta fundamental para lograr la seguridad que el niño necesita. La crianza con apego, “attachment parenting”, es la filosofía impulsada por el pediatra William Sears que sigue las doctrinas de educación de la Teoría del Apego en la psicología del desarrollo, siempre teniendo en cuenta las necesidades de cada bebé. Según esta teoría, los lazos emocionales que surgen durante la infancia entre padres e hijos derivarán en relaciones empáticas cuando sean adultos.

Cómo surge la crianza con apego?

La teoría del apego, término establecido por el psiquiatra y psicoanalista John Bowlby en la psicología del desarrollo.

Bowlby, de niño vio muy poco a su madre. Sólo una hora al día después de cenar y a su padre, médico del rey de Inglaterra, ni eso.

Nació en Londres en 1907 en una familia acomodada. Fue criado por niñeras y a los 10 años lo mandaron a un internado, otra costumbre muy inglesa. (considerado en la sociedad posvictoriana la mejor manera de educar a los niños), El desapego de sus padres lo marcó tanto que dedicó su vida a estudiar sus consecuencias. Está considerado el padre de la llamada «teoría del apego» donde expone que para que el desarrollo social y emocional sea normal, los humanos necesitan formar un estrecho vínculo emocional con un cuidador, al menos durante los primeros seis meses de vida.

Bowlby formuló su teoría a mediados del siglo pasado, cuando Naciones Unidas le encargó un informe sobre las consecuencias de la orfandad en la Europa de la posguerra. Su énfasis en la importancia de establecer una sólida relación afectiva con los hijos se ha hecho un pilar de la crianza, considerado tan necesario como la alimentación y la educación.

Con el paso del tiempo, la teoría de Bowlby se ha ido transformando. De la teoría del apego ha pasado a la crianza con apego, pretende que para lograr este apego las madres tienen que estar, literalmente, enganchadas a sus hijos, y no sólo durante los primeros seis meses. Mediante la lactancia prolongada, dormir con los hijos (colecho), cargarlos encima y no en cochecito (porteo) y estar constantemente pendiente de sus necesidades.

Este concepto nace en Estados Unidos y tiene uno de sus principales impulsores en el pediatra William Sears. Sears y su esposa Martha, enfermera, son un matrimonio profundamente religioso. Padres de ocho hijos, han publicado más de treinta libros. En el más famoso, The “Attachment Parenting Book”, no hay referencias a Bowlby, pero sí un sinfín de indicaciones para convertirse en los mejores padres, a través de una dedicación intensa. Según los Sears, quienes sigan su estilo de crianza conseguirán unos niños «maravillosamente especiales». No sólo «más inteligentes» que el resto, como escriben, sino también con mejor salud, mejor desarrollo y mejor comportamiento.